Se espera que al finalizar 2018, el país cuente con una herramienta que le permita adelantar acciones de adaptación al cambio climático.
Bogotá, agosto 16 de 2017 (@MinAgricultura @aurelioIragorri)-. El Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural, en alianza con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), formalizaron el Programa de Integración de la Agricultura en los Planes Nacionales de Adaptación.
"El cambio climático es una realidad que todavía muchos no están dispuestos a asumir, pero desde que trazamos los lineamientos de la política Colombia Siembra, fue una obligación vincular la actividad agropecuaria con la protección del medio ambiente y la adaptación ante los efectos, en veces devastadores, de fenómenos climáticos que determinan la productividad rural", indicó el ministro de Agricultura y Desarrollo Rural, Aurelio Iragorri Valencia.
Esta alianza recibió respaldo de varios sectores, organizaciones de la sociedad civil e institutos de investigación, con quienes se desarrolló el panel "La transformación del sector agropecuario para hacer frente a los retos de la adaptación al cambio climático", en el cual se presentaron los retos y avances en materia de adaptación desde la visión de distintos actores.
El programa Nacional de Adaptación de Cambio Climático (PNACC-Ag), es una iniciativa global en la que la FAO y PNUD suman esfuerzos para apoyar el proceso de planificación de la adaptación al cambio climático del sector agropecuario a escala nacional; es financiado con Fondos del gobierno alemán a través de la Iniciativa Climática Internacional del Ministerio Federal de Medio Ambiente, Conservación de la Naturaleza, Construcción y Seguridad Nuclear.
En Colombia, el programa se centra en el ajuste y la actualización de la Estrategia de Adaptación del sector agropecuario a fenómenos climáticos, la articulación entre los Ministerios de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), Ambiente y Desarrollo Sostenible (MADS) y el Departamento Nacional de Planeación (DNP), así como dar aportes al plan como herramienta del país para dar cumplimiento a los compromisos en el marco del acuerdo de París y del Marco de Sendai para la Reducción del Riesgo de Desastres 2015-2030.
Se espera que al finalizar 2018, el país cuente con una herramienta que le permita adelantar acciones de adaptación al cambio climático, mejorar las capacidades de toma de decisiones basadas en evidencias e incorporar enfoques diferenciales como el reconocimiento de las necesidades propias de los territorios y la perspectiva de género.